Propiedad histórica con antigua almazara y vistas al mar en Artá.

Esta excepcional finca del siglo XVII ha sido restaurada con exquisito gusto, conservando su carácter original y adaptándola al máximo confort moderno. Situada sobre una parcela de aproximadamente 14 hectáreas, la propiedad ofrece privacidad absoluta y espectaculares vistas hacia la bahía de Canyamel y el mar Mediterráneo.

La casa principal, con unos 855 m² construidos, combina la elegancia de la arquitectura tradicional mallorquina con detalles auténticos cuidadosamente preservados. En su interior alberga un amplio dormitorio principal con baño en suite y zona de oficina, además de tres dormitorios adicionales con grandes armarios empotrados. El salón principal, con techos altos y una imponente chimenea, destaca por integrar de manera excepcional la antigua almazara (“tafona”), creando un ambiente único lleno de historia y encanto.

La vivienda incluye también un acogedor comedor, una biblioteca y una preciosa cocina tradicional equipada con todas las comodidades modernas. Varias terrazas abiertas y cubiertas rodean la casa, ofreciendo distintos espacios para disfrutar del entorno, las verdes colinas y las maravillosas vistas al mar.

El exterior de la propiedad es igualmente impresionante: un jardín maduro con árboles autóctonos, pozo propio y una gran piscina con amplias zonas de terraza desde donde se contemplan vistas panorámicas al mar.

El potencial de esta finca se completa con caballerizas y dependencias renovadas, que ofrecen múltiples posibilidades de uso.

Una propiedad única que combina historia, autenticidad y belleza natural en una de las zonas más encantadoras del noreste de Mallorca.

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